OURENSE, de julio de 2023. Alejo Manuel Diz Franco nació hace 41 años en A Guarda. Estudió Teología en la Universidad Pontificia de Salamanca y en la Universidad Gregoriana de Roma. Empezó los estudios de Derecho en la Uvigo y los prosiguió en la UNED, universidad en la que también estudió un máster en Filología Clásica. Se inscribió en el programa de Derecho y Ciencias sociales de la Escuela Internacional de Doctorado de la UNED (EIDUNED), donde acaba de doctorarse a principios de julio de este año, con sobresaliente cum laude y mención a premio extraordinario. Es profesor de instituto desde hace 15 años, trabajó también como formador durante tres años en el Seminario Menor de Ourense y, actualmente, compagina su docencia en el Instituto con la dirección del Centro de Ciencias Religiosas S. Martín, donde se ofertan el Baccalauraetus y Licenciatus (Grado y Máster) en Ciencias Religiosas. Así mismo, ostenta el cargo de Delegado episcopal de Educación, Cultura y Universidad de la Diócesis de Ourense, así como la representación de Galicia en la Comisión Episcopal de Cultura y Universidad en la Conferencia Episcopal Española.
-¿Cómo surgió la idea de hacer una tesis doctoral?
-Durante mis estudios de máster en la UNED, conocí al profesor Federico Fernández de Buján, que impartía una materia de Derecho romano. Le pedí hacer el Trabajo de Fin de Máster bajo su tutela, y después de ello, me animó a hacer la tesis doctoral, proyecto que ya tenía en mente, auspiciado por el profesor Guillermo Suárez Blázquez, de la Uvigo y tutor de UNED Ourense. Bajo la dirección y codirección, respectivamente, de estos dos profesores, he ido realizando mi trabajo de tesis doctoral, así como las actividades previstas en el programa en Derecho y Ciencias sociales.
-¿Qué título lleva su investigación?
-La tesis se titula: Del divorcio romano a la sacramentalidad tridentina. Estudio histórico-jurídico.
-Interesante
-Mi tesis doctoral hace un recorrido por la institución matrimonial desde Roma hasta el Concilio de Trento, haciendo un recorrido también por las páginas de la Biblia, lo que permiten hacernos una idea de cómo era esta institución en el Antiguo Israel. El trabajo es ambicioso, sobre todo porque gira en torno al estudio de la fuentes, y no solamente se estudian fuentes bíblicas y romanísticas, sino que la evolución de la institución exigió un estudio en profundidad de las fuentes patrísticas, canónicas, de Derecho visigótico, así como una breve aproximación a la teología sacramental medieval y sus disputas, a la posición de Lutero y los reformadores y a los debates y problemáticas que llevan a definir al Concilio de Trento al matrimonio como un sacramento indisoluble.
-¿En qué difieren el matrimonio romano y el cristiano de nuestros días?
-Si queremos establecer diferencias entre el matrimonio romano y el matrimonio cristiano actual, habría que destacar que en Roma el matrimonio no exigía de formalidades para su constitución, que no había un ritual propio de celebración del matrimonio, que el matrimonio duraba lo que durase la voluntad de los cónyuges de querer permanecer unidos y, por lo tanto, el divorcio era libre. El matrimonio cristiano heredado de Trento es un matrimonio sacramental, es decir, que está ordenado a que los cónyuges reciban por medio de la unión la gracia divina y es indisoluble, es decir, que se trata de una unión para toda la vida que, de ser válida, no admite rupturas y, mucho menos, segundas nupcias. Así mismo, exige publicidad y solemnidad, acabando con una tradición de matrimonio consensual y privado de casi dos milenios.
-¿Por qué escogió la UNED para doctorarse?
-La iniciativa de inscribirme en la Escuela Internacional de Doctorado de la UNED surgió de mi director, Federico Fernández de Buján, animado por Guillermo Suárez Blázquez. Debido a que trabajo desde el momento de terminar mis estudios de Teología, no me era posible participar en un programa de doctorado de una universidad pública que exigiese presencialidad, por lo que la UNED, desde un primer momento, se planteaba como una buena opción, máxime teniendo en cuenta que quería realizar mis estudios en una Universidad Pública y, sobra decirlo, el nivel y prestigio que tiene la UNED no lo posee la mayoría de las universidades españolas.
-¿Cuánto tiempo ha dedicado a esta investigación doctoral?
-Me matriculé en la Escuela Internacional de Doctorado en el Curso 2016-2017. A lo largo de todos estos años, casi 8, he dedicado constantemente tiempo a la investigación propia de la tesis, pero al ritmo que me lo permitían mis obligaciones laborales. Debo decir que en todo este tiempo no he parado en ningún momento de trabajar en la tesis, si bien los dos últimos han sido de correcciones y aportaciones por parte del director y codirector.
-¿Ha ido publicando algún artículo previo sobre esta temática?
-A lo largo de todos estos años he ido publicando numerosos artículos en revistas especializadas y he colaborado con capítulos de obras colectivas y todos han girado en torno al tema matrimonial, por lo que todos han tenido algo que ver con la tesis y varios han tocado específicamente temas de la tesis de forma directa.
-Y ahora que ya se ha doctorado en la UNED, ¿qué proyectos tiene?
-Ahora que ya he terminado la tesis y he titulado, me gustaría proseguir estudios. Como soy director de un Centro de Ciencias Religiosas, mi intención es hacer alguna titulación eclesiástica especializada. Aunque el campo que más me interesa es el bíblico, no hay posibilidades de estudiarlo a distancia, por lo que no sé todavía hacia dónde decantarme, aunque muy probablemente haga un máster de dos años en Teología dogmática en la Facultad de Teología del Norte de España. Me gustaría también hacer el grado de filología clásica o bien el de Teología Dogmática.
-¿Recomendaría a otros ourensanos que se doctoren en la UNED? ¿Qué aporta hacerlo en esta Universidad?
-Aunque hay otras ofertas de estudios universitarios a distancia, creo que, por prestigio y nivel, la mejor opción para hacer unos estudios de doctorado en Ourense cuando uno está trabajando es, sin duda alguna, la UNED. Tiene una amplia oferta de programas de doctorado y es la universidad que más experiencia posee en enseñanza semipresencial. Para mí ha sido una plataforma muy cómoda para poder realizar mi tesis, ayudado de mi director y codirector.
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